El sistema de navegación inercial
En
Agosto de 1958 el Nautilus, el primer submarino nuclear operacional del mundo
cruzaba las gélidas aguas del ártico sumergido bajo el casquete polar. En su
viaje de más de 1500 Km. bajo las aguas y a ciegas se utilizó por primera vez
un sistema inercial para calcular la posición. El sistema estaba basado en
giróscopos mecánicos de gran precisión, el cual resulto ser muy voluminoso
(ocupaba todo un compartimento).
Hoy en día los modernos aviones comerciales llevan sistemas que utilizan pequeños
giróscopos electrónicos de reducidas dimensiones.
PRINCIPIO DE OPERACIÓN DE LOS SISTEMAS IRS.
Estos sistemas de navegación están fundamentados en los principios de Newton y sus leyes del movimiento. Esto quiere decir que de alguna manera estos dispositivos pueden detectar dos cosas: aceleración y cambio de posición.
Una característica
básica de los sistemas de este tipo es que para poder calcular la posición
actual a lo largo de nuestro vuelo, es necesario realizar un proceso matemático
de integración continuo. Para ello es necesario tener como base la posición
inicial de la que partimos.
Este es un requisito esencial, por lo que cuando programamos nuestra unidad CDU lo primero que nos pide el sistema es una posición basada en Latitud y Longitud. Normalmente el sistema emplea la posición obtenida vía GPS, pero es posible insertarla manualmente teniendo en cuenta que se debe usar solamente grados, minutos y décimas de minutos, pero no segundos.
Lo que ocurre una vez que despegamos es relativamente sencillo de entender. Una vez insertada nuestra posición el sistema de navegación inercial utiliza sus acelerómetros para poder calcular la posición instantánea del avión cuando volamos. En la ilustración se aprecia que si tenemos dos acelerómetros, uno apuntando en la dirección N-S y otro EW, entonces podríamos calcular cuanta aceleración sufrimos en cada una de las dos direcciones. Si sabemos cuál es la posición de la que partimos podremos saber la posición actual con un proceso matemático de integración. El proceso es complicado para un humano, pero para los ordenadores de un moderno avión comercial esto no constituye ningún problema.
En principio (simplificando mucho) un sensor tipo acelerómetro podría decirnos la cantidad de aceleración en el eje longitudinal del avión en metros por segundo al cuadrado por ejemplo. Si tomamos esta medida y la integramos matemáticamente obtendríamos una velocidad. Podemos decir en términos sencillos que el proceso de integración es simplemente una multiplicación por el tiempo transcurrido. De esta forma una primera integración seria así:
El resultado como puede verse es un vector velocidad (en metros por segundo). Esta velocidad una vez obtenida puede volver a ser integrada una segunda vez por el mismo procedimiento. El resultado de una segunda integración seria el siguiente:
Como puede verse el resultado de la segunda integración es metros o en otras palabras distancia recorrida por la aeronave. Con este método es muy sencillo entender que si podemos calcular por ejemplo la distancia recorrida hacia el Norte y la distancia recorrida hacia el Este, entonces sabremos perfectamente donde nos encontramos después de una hora. Ver gráfico superior. En el mundo real nos movemos sobre una esfera, por lo que resulta más conveniente hacer referencia a nuestra posición en términos de Latitud y Longitud. Sin esta información básica resulta imposible calcular cualquier parámetro.
Para ello el sistema inercial calcula primero el cambio de distancia en el eje Norte-Sur, con lo que podremos saber exactamente nuestra Latitud. Esto es sencillo ya que nos moveremos siempre a lo largo de un círculo de radio máximo (great circle). Lo que no resulta tan sencillo es saber nuestra Longitud, pues no es lo mismo desplazarse en el ecuador o en el Reino Unido, por poner un ejemplo.
Para poder calcular la
Longitud el sistema opera de forma similar, pero ahora deberemos de tener en
cuenta la función secante (simple trigonometría) para poder obtener un
resultado adecuado a la posición en Latitud. Ver gráfico superior.
En el
siguiente gráfico representamos de una forma muy sencilla el proceso de
integración partiendo de los valores obtenidos de los acelerómetros.
Como se
puede ver en la parte superior del gráfico (línea de color magenta), existe una
aceleración grande en un primer momento (despegue), luego la aceleración es
cero (la velocidad no cambia).
Esta aceleración se convierte en velocidad en la parte intermedia del gráfico (línea de color rojo), debido al proceso de integración. En la parte inferior del gráfico podemos ver (línea de color azul) el cambio de distancia que se experimenta con el tiempo.
Ahora bien, los acelerómetros están diseñados para detectar una aceleración, no importa cuál sea la naturaleza de dicha aceleración. Esto supone un problema, ya que cualquier fuerza centrífuga provocaría una aceleración. Piénsese que en su forma más sencilla un acelerómetros simplemente una masa como la que se representa en el dibujo. Esta masa está sujeta a todo tipo de fuerzas, incluida la fuerza de la gravedad o aceleración “g”.
un acelerómetro básico
Ahora bien, los acelerómetros están diseñados para detectar una aceleración, no importa cuál sea la naturaleza de dicha aceleración. Esto supone un problema, ya que cualquier fuerza centrífuga provocaría una aceleración. Piénsese que en su forma más sencilla un acelerómetros simplemente una masa como la que se representa en el dibujo. Esta masa está sujeta a todo tipo de fuerzas, incluida la fuerza de la gravedad o aceleración “g”.
Imaginemos que estamos aparcados en la terminal y los neumáticos del tren derecho se encuentran con una presión menor que la de los del tren izquierdo. ¿Cuál sería el resultado? Sencillamente el acelerómetro le estaría diciendo erróneamente al ordenador de navegación que nos estamos moviendo. Pero en realidad lo que ocurre es que el sensor sufre la fuerza de la gravedad.
Igualmente cuando se produce un giro las
fuerzas centrifugas actúan en los acelerómetros creando errores dentro de los
cálculos matemáticos. Para evitar estos errores el sistema de navegación
inercial cuenta con los giróscopos.
Los giróscopos le van a decir al sistema si
nos estamos moviendo y caso de hacerlo informaran de la cantidad de movimiento
en cada uno de los tres ejes del avión.
Con estos datos podemos saber perfectamente cuál es la actitud del avión, si estamos cabeceando, alabeando, etc. En la ilustración inferior se aprecia que los cálculos de aceleración de los acelerómetros (rectángulos alineados con los ejes del avión) son combinados con la información proveniente de los giróscopos (triángulos).
Después de los dos procesos de integración se consigue el cálculo de cambio de posición, que junto con la diferencia de la posición inicial nos dará la posición actual. En cada una de las unidades IRS se encuentran alojados tres acelerómetros y tres giróscopos láser. Cada unidad por si sola puede calcular los movimientos y las aceleraciones en cada uno de los tres ejes del avión. Es muy importante que estas “cajas negras” se encuentren perfectamente alineadas con los ejes del avión en su compartimento de aviónica. No todos los aviones son iguales y el intercambio de unos a otros no sería posible sin una cuidadosa alineación inicial. Una vez que los IRU están perfectamente instalados y alineados podrán darnos valiosa información con la que podremos trabajar nosotros y otros sistemas del avión, como por ejemplo el FMS.
Los giróscopos que se utilizan en los modernos aviones comerciales son del tipo láser, conocidos como RLG’s (Ring láser Gyros).
Un
giróscopo puede detectar cualquier variación de posición con respecto a un eje
dado, en el caso de nuestro avión un giróscopo láser por ejemplo detectaría
cualquier rotación sobre uno de los ejes del avión. Estos dispositivos electrónicos están diseñados
para poder “sentir” cualquier variación por pequeña que sea en los 3 ejes ortogonales
del avión. Son extremadamente sensibles, tanto que incluso podrían detectar el
movimiento de la tierra.
El principio de operación es el siguiente: se utiliza
un trozo de un cristal especial conocidos como “Cervit” “Fused Quartz” (General
Electric Corporation) o “Zerodur”. Este cristal es muy estable por lo que no se
contrae o expande bajo condiciones extremas de cambio de temperatura o presión.
Estos materiales son conocidos por sus siglas en ingles ULE “Ultra Low
Expansión” lo que los hace ideales para producir materiales ópticos de gran precisión.
Dentro de este cristal se realiza un orificio con herramientas especiales,
también de gran precisión. Estos orificios a modo de túnel se rellenan con una
mezcla a gran presión de gases inertes (normalmente Helio y Neon).
La forma de
estos giróscopos puede variar, pero generalmente son de tipo triangular. En uno
de las caras de este cristal se coloca un ánodo y en las otras dos se utilizan
cátodos. Una vez que ese aplica energía eléctrica de alto voltaje (unos 3000
Voltios) se produce una descarga en el interior que altera la configuración
atómica de los gases. De esta forma uno de los electrones de las capas exteriores
del helio gana energía y sale despedido.
En su vuelo tropieza con los átomos de
Neon y el choque produce fotones, estos a su vez vuelan en todas direcciones a gran
velocidad (próxima a la de la luz) impactando con otros átomos y liberando más
fotones, esto es lo que se conoce como efecto bombeo o pumping effec en inglés.
El proceso continua hasta crear un rayo láser visible al ojo humano. En
realidad puesto que tenemos dos ánodos y un cátodo se crean 2 rayos láser que
vibran en la misma frecuencia (son resonantes).
Uno de los rayos viaja dentro
del cristal en sentido horario y el otro en sentido contra-horario.
Cuando el
giróscopo esta en reposos los dos rayos viajan en direcciones opuestas
partiendo desde un mismo punto y reuniéndose en otro punto al final de su
recorrido. Cualquier movimiento del giróscopo rotando sobre su eje sensor hará
que uno de los rayos recorra más camino y el otro menos, ver diagrama inferior.
El rayo azul parte de t1, pero finaliza más allá en t2. El rayo rojo se encuentra antes con el sitio donde partió y recorre menos distancia. En física se sabe que la velocidad de la luz (C) es constante, y que resulta igual a la multiplicación de sus dos características principales (frecuencia y longitud de onda). Esto quiere decir que si una de las dos características de la luz varia la otra debe de hacerlo también (y en sentido inverso), para mantener la velocidad de la luz constante. Como se puede ver en la ilustración los caminos de los rayos difieren en longitud (longitud de la onda), por lo que la frecuencia que detectaremos será también diferente. Esta diferencia de frecuencias es proporcional a la cantidad de movimiento.
La diferencia de recorrido puede ser calculada como un cambio de la frecuencia
resonante de ambos rayos. Para ello se utiliza un sensor en uno de los espejos
del cristal. Este espejo es semitransparente, por lo que parte del rayo puede
ser detectado por la unidad sensora. Dicha unidad emplea un patrón de
frecuencias característico que ayuda a calcular la diferencia de frecuencias
entre los dos rayos. Para ello emplea siguiente la fórmula:
LOS
ERRORES DEL IRS
Obviamente
esta vibración ayuda en un sentido, pero perjudica en otro, pues introduce
cierto error en los cálculos. Otro problema que sufre este sistema es que la
superficie de la tierra es irregular dando como consecuencia diferentes valores
de la gravedad en diferentes puntos del planeta. Además a esto hay que añadir
que la superficie de la tierra es curva y se mueve con la rotación de la
tierra. Estos efectos se pueden compensar con correcciones internas, pero
también aumentan el error en los cálculos.
Uno de los métodos más eficaces para
corregir los problemas debido a posibles aceleraciones erróneas es el llamado
Schuler Tunning (péndulo de Schuler). Al intentar que nuestro avión describa al
volar sobre la superficie de la tierra una circunferencia y que la aeronave se
sitúe siempre en la vertical de un punto lo que en realidad estamos es
recreando el comportamiento de un gigantesco péndulo. Este péndulo teórico
tendría su masa situada en el centro de la tierra y su suspensión seria el
punto donde se encuentra nuestro avión.
Si existiera algún error debido a
aceleraciones incorrectas o de cualquier otro tipo, sería algo parecido aquel
la masa del péndulo se moviera. Esta oscilación en realidad introduce un
pequeño error, pero resulta ser periódica (84,4 minutos) con lo que los errores
introducidos oscilaran también periódicamente. Los errores así introducidos que
varían con el periodo de Schuler se llaman BOUNDED ERRORS. Existen otro tipo de
errores que si incrementan con el tiempo y estos errores se denominan UNBOUNDED
ERRORS en inglés.
Estos errores que crecen
con el tiempo sumados a los anteriores crean el desvío de la ruta. Es lo que los
anglosajones llaman DRIFTING. De acuerdo a la legislación vigente, el error
(DRIFT) de este sistema no debe de ser más de 2 millas náuticas por hora de
vuelo, pero en la actualidad los modernos sistemas se encuentran en las 0.2 millas
por hora de vuelo. Incluso estos pequeños errores deben de poder corregirse, es
por ello que el sistema cuenta compuesta al DIA continua de la posición. Este
UPDATING en la terminología inglesa se logra gracias al sistema FMS cuando
existe la posibilidad de sintonizar estaciones DME/DME o VORDME con la mejor
geometría. Si existe una buena capacidad GPS también se puede utilizar para
recalcular la posición del sistema IRS. Como medida de seguridad cuando los IRS
trabajan, lo hacen conjuntamente haciendo una medición conjunta, tomando los
valores intermedios de las dos unidades. Esto es lo que se denomina doble
mixing en inglés.
Que artículos tan interesantes escribe usted , son de mucha ayuda, un cordial saludo y agradecimiento
ResponderEliminarMuchas gracias por el comentario Jairo.
EliminarUn cordial saludo
Manolo