El origen de los misiles tierra-aire (SAM)

Durante tres años trabajé para la OTAN en Munich. Una de las cosas que más me gustaron de esa ciudad fue su gran museo dedicado a la ciencia y a la técnica, existen pocos museos como este en el mundo. Debo de admitir además, que me siento un tanto germanófilo, sobre todo desde que pude ver de primera mano toda la organización y el desarrollo llevado a cabo por aquel país y el amor por la ciencia que demuestra el pueblo alemán. Una de las cosas que siempre quise ver de cerca fueron aquellos misiles y cohetes que tanto habíamos estudiado en el curso de especialidad del Ejército del Aire. Allí por fin, tuve la oportunidad de ver y tocar cosas como la impresionante V2. Un "bicho" enorme (abierto para que se le vieran bien las "tripas") que ocupaba tres pisos del museo. Estudiando la capacidad técnica de Alemania en los años 30 y 40, uno se de cuenta de que la guerra bien hubiera podido tomar otro rumbo si las decisiones estratégicas del mando hubieron sido las adecuadas.

un cohete A 4 (V2) de 1945 (original) en el Deutsches Museum, museo de la ciencia y de la técnica de Munich.

El secreto del progreso alemán: invertir en investigación y despertar la emoción

Aunque parezca mentira, en junio de 1927 se había formado ya en Alemania la sociedad para los viajes espaciales (Verein für Raumschiffahrt también conocida como VfR). En aquel mismo año un joven de 17 años se unió entusiasmado a esa sociedad. Su nombre era Wernher von Braun...

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