Los verdaderos héroes alemanes

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En el post titulado "Los verdaderos héroes americanos" contaba la historia de un aviador que se conmovió al ver a la población alemana derrotada y sin esperanza. Decidió hacer algo que no estaba escrito en las ordenanzas y su "pequeña" acción tuvo grandes y hermosas consecuencias. Se dice que los aviadores están hechos de otra pasta. La camaradería y la empatía que existe en este colectivo es difícil de encontrar en otras profesiones. Hoy traigo la historia emotiva de un piloto Alemán que muchos aficionados seguramente habrán oído.

Durante la campaña de bombardeo llevada acabo por los aliados en Alemania, se produjeron cientos de enfrentamientos entre bombarderos fuertemente artillados y cazas alemanes. Pongámonos en situación. Es 20 de diciembre de 1943. Nos encontramos inmersos en la campaña de bombardeo estratégico y de precisión de la que tanto hemos comentado en este Blog. Estos bombardeos requerían que los B-17 volaran hasta el corazón de Alemania para destruir las factorías y la infraestructura que alimentaba la maquinaria de guerra nazi. La USAF de día y la RAF por la noche volaban casi sin descanso sus bombarderos, la Luftwaffe alemana hacía presa fácil en ellos al no contar estos todavía con escolta de cazas de largo alcance.

Ese día tocaba bombardear la histórica Bremen, la populosa, musical e industrial ciudad del norte bañada por el río Werder. Esta vez la misión era tratar de destruir las factorías donde se montaba el excelente avión de combate Focke-Wulf 190. En el transcurso de la operación y ya de regreso después del bombardeo, el B-17 Flying Fortress apodado "Ye Olde Pub" del 379th Bomber Group se vio fuertemente dañado por los ataques de los cazas Messerschmitt Bf 109 que lo acosaban en su retirada. El bombardero estaba pilotado por el segundo teniente Charlie Brown originario de un pequeño pueblo de Virginia. Charlie intentaba pilotar su B-17 bajo el fuego enemigo, pero el avión se encontraba severamente dañado y no podía efectuar maniobras evasivas.

Por otro lado el enemigo contaba con grandes pilotos de caza que sacaban lo mejor del Me-109. Uno de estos ases alemanes era un antiguo piloto Bávaro de líneas aéreas llamado Franz Stigler. Este veterano piloto de caza de la Luftwaffe contaba ya con 22 derribos en su haber y se encontraba a solo un derribo más para poder obtener la Cruz de Caballero. Una condecoración que solo se otorga como reconocimiento a la valentía de los más bravos y osados pilotos militares.

El "Ye Olde Pub" había perdido el motor número 3, con lo que el avión solo disponía del 60% de la potencia a pleno rendimiento. Pero las cosa estaban bastante peor. Además de la falta de potencia el sistema de oxígeno, parte del sistema hidráulico y eléctrico estaban inutilizados. El bombardero además había perdido bastantes partes estructurales, como la mitad del timón de dirección, parte de la cola y el elevador izquierdo. Toda la tripulación estaba herida y volaban ya con algún cadáver. El propio Chralie tuvo que soportar el dolor de su herida en el hombro, ya que las ampollas de morfina se habían congelado. Pilotar en esas condiciones entre un enjambre de Focke-Wulf y Messerschmitt era terrible. Para colmo de males la brújula funcionaba mal, no tenían radio y la mayoría de las ametralladoras de calibre 50 estaban encasquilladas. Charlie volaba desorientado ...y en el rumbo incorrecto. "Ye Olde Pub" se adentraba en el corazón de la Alemania nazi como si pidiera inmolarse.


Cuando el bombardero americano pasó por encima de un campo de aviación de la Luftwaffe fue rápidamente avistado y se dio la alarma. Franz Stigler se encontraba en ese momento repostando su Messerschmitt Bf 109 G-6 y raudo despegó para dar caza a esos enemigos que acababan de atacar su nación. El veloz caza alemán no tardó en alcanzar al maltrecho bombardero. Al aproximarse para el ataque Franz se dio cuenta de las pobres condiciones en las que volaba este B-17 y pudo ver a la tripulación malherida a través de los muchos orificios y destrozos que le habían hecho en su estructura. El propio Charlie al ver aproximarse el caza se dio cuenta de que ese iba a ser su final. Franz se disponía a disparar. El bombardero estaba a su merced y esa iba a ser la victoria 23 que lo elevaría a rango de héroe. Pero en vez de pensar en eso, algo conmovió a Franz. El enemigo no se podían defender. Ya estaban vencidos y probablemente acabarían estrellándose incluso sin necesidad de dispararles... En ese momento Franz se acordó de las honorables palabras de su comandante Gustav Rödel cuando Franz servia bajo su mando en el Norte de África. "Vosotros sois ante todo y para siempre pilotos de caza. Si alguna vez oigo que alguno de vosotros le dispara a un paracaidista, yo mismo le pegaré un tiro". Para Franz el B-17 era como un paracaidista. Simplemente no era honorable derribarles en esas lamentables condiciones.

El famoso incidente pintado por uno de mis artistas preferidos: John D. Shaw
http://greatbustardsflight.blogspot.ch/2015/02/arte-en-aviacion-john-d-shaw-mi-favorito.html

Franz se puso a la altura del cockpit del B-17 y entabló contacto gestual (la radio no funcionaba). Trató de convencer al atónito Chralie Brown de que debía seguirlo para aterrizar en un campo alemán y allí rendirse. De esa manera los heridos serían tratados y luego hechos prisioneros. El norteamericano no podía creer que el "feroz" enemigo que tantas veces les habían indoctrinado fuera ahora a ayudarles. Pero así fue. El alemán se dio cuenta de que Charlie estaba perdido y sin intención de entregarse, pues Charlie Brown ordeno a un artillero que apuntara con su ametralladora al caza alemán, pero sin disparar. Franz entonces le hizo señas y finalmente lo guió en dirección a Suecia, un país neutral. Decidió escoltarlo en formación para que no fuera derribado por otros cazas o antiaéreos alemanes y estuvo ala con ala todo el tiempo hasta que este se encontró a salvo sobre las aguas en dirección al país nórdico. Entonces Franz miró a Charlie. El alemán se despidió con un saludo y les dejó marchar. Les acababa de salvar la vida. Franz Stigler no dijo nada de esto a sus superiores, ya que ello podría costarle un consejo de guerra y quizás ser fusilado. Así se pagaba al que dejara escapar al enemigo.

Por su parte Chralie Brown informó de lo ocurrido, pero el alto mando le exigió que guardara absoluto secreto sobre el tema. No podía hacerse publico de ninguna manera que los alemanes pudieran ser "humanos". No era bueno para la moral del combatiente. El incidente fue silenciado y el alto mando alemán nunca supo de la altruista acción de Franz Stigler.

Después de la guerra

Brown se retiró del ejército en 1965, más tarde trabajó en el departamento de estado hasta 1972 y finalmente fijó su residencia en Miami. Stigler se mudó a Canadá y le fueron muy bien las cosas como hombre de negocios. En 1986, durante una reunión de antiguos combatientes alguien pregunto a Brown cual había sido su recuerdo mas vivo sobre aquella contienda. Después de pensarlo durante un minuto lo único que le venía  a la mente era aquel caballero alemán que le saludó desde su avión de combate. Chralie decidió entonces intentar saber su paradero si es que esta persona siguiera con vida.

Finalmente y después de muchas investigaciones, Charlie escribió una carta a varias asociaciones de ex-militares contando el incidente. Despues de varios meses un buen día Charlie recibió una carta donde se decia: "fui yo". Puestos al habla por teléfono, Stigler relató el incidente tal cual Charlie lo recordaba... se vieron en persona en un emotivo encuentro grabado para la TV.


Desde entonces ambos se convirtieron en grandes amigos y su amistad perduró hasta la muerte de ambos. Chralie y Franz murieron con pocos meses de diferencia en el año 2008.    


Se escribió un emotivo libro sobre todo esto: A Higher Call: An Incredible True Story of Combat and Chivalry in the War-Torn Skies of World War II, de Adam Makos, publicado en 2012. En la actualidad se está empezando a producir la película titulada A Higher Call, basada en el libro.


Post sobre cine y los bombarderos B-17:



















































http://www.dannyfinnegan.com/2013/01/this-is-definition-of-honor.html

http://historiasdelahistoria.com/2012/12/20/despues-de-44-anos-consiguio-saber-por-que-su-enemigo-le-perdono-la-vida



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