Politica ficción: Heinkel 105 Pfeil

Estoy en casa aburrido y me da por imaginar que nos encontramos en un universo paralelo. Es la España de los años 40. Podría ser esa España que nos describe Arturo Pérez-Reverte, donde Lorenzo Falcó, espía, asesino, sinvergüenza y carismático agente secreto, se desenvuelve como pez en el agua. El mundo está en guerra. A pesar de las bravuconadas de Göring, Alemania presiente que puede sufrir bombardeos en sus plantas y factorías de aviones. 

Para asegurarse la producción, Hitler manda a Madrid una extensa delegación comercial para la firma de un acuerdo de deslocalización industrial. Se trata de que parte de su producción de cazas se elabore de forma discreta en la recién creada factoría española Construcciones Aeronáuticas Heinkel Hispania (CAHH). 

Los mejores ingenieros alemanes y españoles trabajan en la producción de nuevos modelos de aviones cada vez más capaces, pero el poderío industrial norteamericano decide la contienda. Al terminar la guerra, España se ve obligada a la autarquía debido al aislacionismo internacional, pero la industria aeronáutica es puntera gracias al capital humano y al ingenio de buena parte de los técnicos de alto nivel. 

Ya en los años 50, CAHH se ha convertido en un centro tecnológico impresionante. La industria aeronáutica española da trabajo a más de 150.000 personas. En esos momentos somos referencia industrial en el mundo aeronáutico y queremos desarrollar nuestros propios modelos. CAHH recibe entonces un requisito del gobierno español para producir un bombardero a reacción de muy altas prestaciones.    

En pocos meses desde que se hacen los planos, se logra poner en vuelo un avión tan avanzado que los gobiernos de los países vecinos quedan impresionados. Al igual que ocurriera anteriormente con los motores hispano-suiza, la nueva compañía aúna la precisión teutona con la pasión española. El resultado no solo es un avión espectacular y avanzado también se ha diseñado un novedoso sistema de control de fuego y unos motores excepcionalmente potentes llamados Íberos. 

Se producen 5 aviones de prueba y se pretende alcanzar récords nunca antes imaginables, pero el gasto se dispara y el proyecto comienza a crear dudas entre la cúpula política y militar. España deja de estar aislada y los norteamericanos nos ofrecen material militar a precio de ganga si abandonamos el proyecto. Además, los norteamericanos nos integrarán en la OTAN y seremos parte de su sistema de defensa occidental. 

Finalmente, un brusco cambio de gobierno pone al frente de España a un grupo de ministros ultraconservadores que acaban por cancelar el proyecto. Se decide destruir todo el material producido, planos, herramientas, sistemas y utillaje para que nada caiga en manos de los espías soviéticos que se habían infiltrado en el tejido industrial español. 

La orden tiene unas consecuencias nefastas para CAHH y para toda la industria aeronáutica, que se ve abocada al cierre. Todo el personal es despedido y comienza una fuga de cerebros que dejan el país. El sueño aeronáutico de contar con una industria independiente de primer nivel se desvanece para siempre. España finalmente compra los F-104 Starfighter y acaba dependiendo armamentísticamente de los Estados Unidos y de Francia para el futuro. 

¿Cómo nos sentiríamos los españoles ante una debacle industrial como esa? El lector ya se habrá dado cuenta de que esta historia es a grandes rasgos lo que ocurrió en Canadá con el CF-105 Arrow. Una buena forma de sentir empatía a pesar de la guerra del fletán. ¡Que malo es el aburtimiento!

Aquí van los enlaces de los comentarios:

‐------------------------ Enlce del proyecto Islero ----------------------

Comentarios

  1. Puestos "a ponernos" aquí llegamos casi al final con el proyecto Islero con gran implicación del EdA, y no, no estoy hablando de aviones...

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    1. Efectivamente, el proyecto Islero era la bomba... :) un tema controvertido

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    2. Buen chiste ;-) creo que en España siempre hemos tenido capacidad humana, técnica ( y coj...s) para afrontar casi cualquier proyecto, otra cosa era la maldita quinta dimensión, la política.

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    3. Totalmente de acuerdo contigo mi querido amigo. Voy a dejar un enlace al final del post sobre ese proyecto que no fue política ficción.

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  2. Hubo un modelo diseñado por Rafael Rubio Elola, que tenía motores situados sobre las alas, algunos dicen que los estadounidenses les gustó la idea y la incorporaron al A-10, también se tenía diseñada una especie de lanzamiento sobre raíles desde la montaña para este avión, no sé si a modo de catapulta. No recuerdo el modelo, es una de estas cosas que ves brevemente.

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    1. Si querido amigo, efectivamente, se trataba del Hispano Aviación HA-500 Alacrán. Un avión impresionante que no pasó de los tableros de diseño, pero a muchos países les gustó la idea.

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    2. te dejo los enlaces al final del post :)

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    3. Muchísimas gracias, no recordaba el nombre.
      ¿Los planos de ese tipo de proyectos están desclasificados?

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    4. Me respondo a mí mismo, en el enlace que pusiste están los planos, mi duda era porque yo vi los originales. Y no sabía hasta que punto se podía comentar algo o no. jaja.

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    5. Toni, vigila a tu espalda y si te siguen dos tíos grandes con gabardina negra larga y sombrero de ala ancha, corre. Corre por tu vida y no mires atrás...
      Ja, ja, ja

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