La aviación en el cine: Al borde del infierno (1956)


El mayor Lincoln Bond es un piloto separado del servicio tras la guerra de Corea, donde fue hecho prisionero y sometido a tortura, de resultas de la cual padeció un colapso nervioso. La intención de Bond es recuperar el prestigio perdido y volver a volar, para lo que deberá probar previamente su valía y su equilibrio mental.

La ayuda de su novia, Connie, secretaria del brigadier general Banner, que se opone a su vuelta al servicio, y más todavía entre los pilotos de pruebas de la Fuerza Aérea en la base de Andrews, será esencial para lograr sus propósitos y así participar en el proyecto de un nuevo avión supersónico. Sin embargo, a medida que va adentrándose en las características técnicas del nuevo ingenio, Bond advertirá que este no puede seguir adelante y, para probarlo, no vacilará en arriesgar su vida en un último vuelo más que peligroso.


Toward the Unknown, originalmente llamado Flight Test Center y titulado Brink of Hell en su lanzamiento en el Reino Unido, es una película de 1956 sobre el comienzo del vuelo supersónico filmada en la base de la Fuerza Aérea Edwards. Protagonizada por William Holden, Lloyd Nolan y Virginia Leith, la película presenta el debut en la pantalla de James Garner.

Toward the Unknown fue dirigida por Mervyn LeRoy y escrita por Beirne Lay, Jr., quien también había escrito la novela y el guión de Twelve O'Clock High (1949), y posteriores guiones de Above and Beyond (1952) y Strategic Air Command (1955). ). El título de la película se deriva del lema del Centro de pruebas de vuelo de la Fuerza Aérea, Ad Inexplorata. 

Especificaciones técnicas:
  • Duración: 1 h 55 min (115 min)
  • Mezcla de sonido: Mono (grabación de sonido RCA)
  • Color: Color (WarnerColor)
  • Relación de aspecto: 1,85:1
  • Formato negativo: 35 mm
  • Formato de película impresa: 35 mm
Trama

El comandante de la USAF Lincoln Bond (William Holden) fue capturado durante la Guerra de Corea y sometido a tortura, finalmente se rompió después de 14 meses y firmó una confesión utilizada para la propaganda. Tras su liberación, tardó un año en recuperarse de la terrible experiencia antes de presentarse en el Centro de pruebas de vuelo en la Base de la Fuerza Aérea Edwards, con la esperanza de volver a trabajar como piloto de pruebas. Su viejo amigo, el coronel McKee (Charles McGraw), hace todo lo posible por él, pero el comandante de la base, el general de brigada Banner (Lloyd Nolan), lo rechaza porque no puede confiar en que se mantenga estable. Una complicación es que la secretaria general e interés amoroso, Connie Mitchell (Virginia Leith), es una vieja novia. Bond presiona para un trabajo y acepta la oferta del general de volar de rutina en apoyo. Banner es un líder práctico y asume él mismo las tareas más peligrosas.


Cuando Bond vuela el nuevo caza Gilbert XF-120, encuentra peligrosos problemas estructurales que amenazan su inminente aceptación por la Fuerza Aérea. Afirma que no presionó al avión más allá de sus especificaciones de diseño, pero nadie le cree, especialmente H. G. Gilbert (Ralph Moody), el jefe de la compañía que construyó el caza. Cuando el general intenta replicar las maniobras de Bond, no ocurre nada adverso. Después, Bond ve a Banner casi colapsar en el vestuario, pero Banner se encoge de hombros ante el incidente.

Los dos comienzan a confiar el uno en el otro, especialmente cuando Banner está en peligro en un vuelo de prueba y Bond, con calma y habilidad, acude al rescate. Luego, el mayor Joe Craven (James Garner), otro amigo cercano de Bond, muere cuando un ala de su XF-120 se desgarra, lo que confirma la advertencia de Bond. La rehabilitación de Bond corre peligro cuando un comandante borracho "Bromo" Lee (Murray Hamilton), el mejor piloto de pruebas de Banner, intenta entablar una pelea con él en el club de oficiales. Bond reacciona mal cuando lo retiene un transeúnte, evoca recuerdos de su encarcelamiento en la Guerra de Corea y golpea a Bromo dos veces.

Con el reconocimiento de que ambos hombres eran los culpables del altercado, Banner le da a Bond la tarea que anhela: el X-2 propulsado por cohetes, que está diseñado para volar hasta el borde del espacio exterior. Sin embargo, el general insiste en pilotar el primer vuelo de prueba a plena potencia, a pesar de la fuerte presión de su superior, el teniente general Bryan Shelby (Paul Fix), para que un hombre más joven se haga cargo del peligroso trabajo. Cuando se asigna a Bond para realizar la última prueba de media potencia antes del vuelo principal, alcanza la máxima potencia sin autorización y apenas sobrevive a un rescate a gran altitud cuando la aeronave se sale de control. El cirujano de vuelo de la base le dice a Banner que solo una persona joven y en forma podría haber sobrevivido, lo que llevó al general a aceptar un ascenso y una transferencia. Recomienda al coronel McKee como su sucesor. Aunque Banner se ofrece a llevar a Connie con él a su nueva asignación, ella decide quedarse con Bond.



Elenco:
  • William Holden como Major Lincoln Bond 
  • Lloyd Nolan como el general de brigada Bill Banner
  • Virginia Leith como Connie Mitchell
  • Charles McGraw como el coronel R. H. "Mickey" McKee
  • Murray Hamilton como Major "Bromo" Lee
Como otras estrellas importantes de la época, Holden decidió intentar producir películas él mismo, creando Toluca Productions. Al final, sin embargo, encontró demasiado trabajo adicional, y Toward the Unknown fue la única película de Toluca Productions. En un principio, los papeles protagónicos tenían a Clark Gable como General Banner y Gregory Peck como Major Bond, pero los problemas contractuales requirieron un cambio, con Holden asumiendo el papel de estrella además de productor. 

James Garner, quien hizo su debut cinematográfico con esta película y tuvo una mala relación con el director Mervyn LeRoy que intentó agredirle en una ocasión durante el rodaje. Toward the Unknown se produjo con la cooperación total de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos y el rodaje principal tuvo lugar durante el invierno de 1955. 

Es la primera película que cuenta la carrera de la USAF en el espacio con el programa X-plane, el lema de Toward the Unknown decía: "¡La primera historia en pantalla sobre cohetes pilotados por norteamericanos!" La utilización de las instalaciones de la Base Aérea de Edwards y sus lechos de lagos secos para los aterrizajes de emergencia, Rosamond Lake y Rogers Dry Lake, así como otras instalaciones, de la fuerza aérea, dan un aire de autenticidad a la producción. Los asesores técnicos del Comando de Investigación y Desarrollo Aéreo (ARDC), el mayor Price Henry, el teniente coronel Ralph Martin y el teniente coronel Frank Everest Jr., actuaron como asesores técnicos de la producción. 

Toward the Unknown también abordó el controvertido tema del personal militar sometido a tortura y lavado de cerebro. El personaje de Holden se asemeja mucho a tres pilotos de la USAF, el coronel Walker "Bud" Mahurin, un doble as de la Fuerza Aérea que fue derribado en Corea y torturado antes de firmar confesiones de crímenes de guerra, el teniente coronel Everest, que tuvo una experiencia similar en prisión después de ser derribado en China durante la Segunda Guerra Mundial, y el Capitán Milburn G. Apt, quien murió después de perder el control del X-2 minutos después de convertirse en el primer piloto en superar Mach 3. Holden y Everest, quien actuaba como el "jefe de vuelo" de la película, se hicieron buenos amigos durante la producción. De manera similar, el carácter del General Banner se basó en el Mayor General Albert Boyd, el primer Comandante del Centro de Pruebas de Vuelo de la USAF en Edwards AFB. 

Aviones militares a tutiplén 

Una maravilla de película para los aficionados. Toward the Unknown nos muestra la flota de aquella época compuesta por aviones de combate de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos: 
  • Convair C-131 Samaritan, 
  • Convair F-102 Delta Dagger, 
  • Douglas B-66 Destroyer, 
  • Lockheed F-94 Starfire, 
  • McDonnell F-101 Voodoo, 
  • North American F-86 Sabre, 
  • North American F-100 Super Sabre, 
  • Republic F-84F Thunderstreak y 
  • Sikorsky H-19D Chickasaw
Estos aviones que los aficionados a la aeronáutica conocen perfectamente, se pueden ver a lo largo de la película, tanto en tierra como en vuelo. En unas imágenes de archivo inusuales también se puede ver un conjunto de cohetes que se está probando y el uso del avión cisterna Boeing YKB-29T Superfortress haciendo reabastecimiento en vuelo con un F-100, F-101 y B-66. Otra de las cosas que se pueden ver es un Republic EF-84G Thunderjet en un lanzamiento de longitud cero. 


También aparecieron en segundo plano el Beech C-45 Expeditor, Boeing B-47 Stratojet, Convair B-36 Peacemaker, Douglas C-47 Skytrain, Lockheed T-33 Shooting Star, North American B-25 Mitchell, North American B-45 Tornado y el Republic F-84 Thunderjet. La secuencia aérea final está sacada de un espectáculo aéreo realizado en la base y muestra el equipo de demostración aérea de los Thunderbirds en 1955, volando cazas Republic F-84F Thunderstreak en una escena descrita como "acrobacias especiales" en los títulos de crédito.

El Bell X-2, su nave nodriza Boeing EB-50D, Douglas D-558-2 Skyrocket y Douglas X-3 Stiletto también se presentan como aviones experimentales que se están probando en Edwards AFB. Se utilizaron imágenes del Convair XF-92 simulado para representar al último caza F-102 en la escena del accidente inicial, mientras que el prototipo del bombardero Martin XB-51 superviviente se erige como el caza ficticio "Gilbert XF-120". 



Crítica

Toward the Unknown es el típico ejemplo de la incursión de actores en la producción de películas. El ídolo de la pantalla William Holden, de hecho, se involucró mucho en esta producción. La película también refleja las hazañas de los pilotos de prueba de la vida real como Chuck Yeager, que fueron objeto de titulares en todo el mundo. Son los que no fueron elegidos para la gloria, pero que desarrollaron un trabajo importantísimo. Es una película de aviones que vale la pena ver si te gusta la aviación. 

La historia quizás es la típica sobre conflictos personales y la fe de una mujer que ayuda al prota y que ya hemos visto muchas veces en otras películas del género. En general podemos decir que no es una gran película, pero todo depende de si consideras la película como séptimo arte o como una oportunidad de ver sosas interesantes, como por ejemplo el espíritu de la época y la descarada muestra de propaganda norteamericana en plena Guerra Fría. Absolutamente transparente, muestra material y exhibiciones espectaculares de aviones de combate en vuelo. Es también una visión entusiasta y patriótica de la Carrera Espacial norteamericana. Vista con los ojos de hoy en día es casi más un documento filmico que una peli propiamente dicha. Un 7,5 de 10 por su valor histórico.

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